
A nivel organizacional se generan dinámicas que a la larga afectan las relaciones interpersonales de sus miembros, situaciones que se ven reflejadas en la eficiencia de su capacidad productiva.
A nivel individual, las personas se ven envueltas en situaciones como el compromiso laboral, la paternidad, relaciones de pareja, conflictos familiares, etc. que transforman su vida en una peligrosa espiral descendente que poco a poco degenera su calidad de vida.